Conocer cómo quitar las manchas en el parquet, especialmente las más comunes, puede serte de gran ayuda para conservar tus suelos de madera. Las manchas de vino, café, grasa o humedad son inevitables con el uso diario, pero si se tratan a tiempo y con los productos adecuados, el suelo puede mantenerse en perfecto estado durante muchos años.
Cómo quitar las manchas más comunes en suelos de madera interiores
Manchas de tinta y rotuladores
Si tienes niños, es común encontrar marcas de tinta, pintura o rotulador en tu suelo de madera. Para eliminarlas, simplemente limpia la superficie con un paño humedecido en acetona. También es importante que evites el uso de alcohol para limpiar este tipo de manchas, ya que es un producto más agresivo y puede dañar tu parquet.
Marcas de zapatos
Las marcas de zapatos son una de las manchas más frecuentes, pero también de las más fáciles de eliminar. Una solución sencilla para mantener tu suelo de madera limpio de este tipo de manchas es pasar un paño humedecido en agua sobre la marca.
Aunque su eliminación sea sencilla, es importante no dejarlas pasar, ya que las marcas de los zapatos, incluido el barro que a veces traemos, pueden opacar y desgastar el acabado del parquet acumulando suciedad. Esto afectará a su apariencia y mantenimiento.
Manchas de vino o café
Otro tipo de manchas que suelen aparecer, son los derrames accidentales de vino o café. Para tratarlos, limpia la zona con un trapo humedecido en jabón neutro u otro producto específico para parquet.
Una de las ventajas de las tarimas sintéticas (o parquet), es que no son porosas, lo que significa que no absorben líquidos fácilmente.
Manchas de sangre
Las manchas de sangre habitualmente causadas por accidentes caseros, se pueden eliminar usando un trapo humedecido en agua fría. Es importante que actúes rápidamente para evitar que la mancha se seque.
Además de ser muy visibles, las manchas de sangre pueden atraer bacterias si no se limpian de manera adecuada y oportuna.
Manchas en tarimas exteriores: cómo actuar
Las tarimas exteriores están expuestas a la intemperie y, por tanto, a factores como la lluvia, el sol, el cloro de las piscinas o la humedad constante. Todo ello puede provocar la aparición de diferentes tipos de manchas, especialmente durante los primeros meses tras su instalación. Algunas de sus principales manchas son:
Manchas de tanino
Las manchas de taninos son muy frecuentes, sobre todo cuando la tarima está recién instalada. Estas manchas aparecen por los elementos naturales del material, y a menudo resultan difíciles de identificar o eliminar al principio. Es un proceso normal en los primeros meses tras la instalación. Bastará con hidratar la tarima con un cepillo, agua y jabón neutro para que las manchas desaparezcan. En épocas de lluvia, especialmente en invierno, el tanino puede surgir más rápidamente, pero también se eliminará con facilidad.
Manchas provocadas por la humedad
El contacto constante con el agua o el estancamiento entre las lamas puede provocar manchas oscuras o decoloraciones. Para evitarlas, se recomienda mantener la superficie seca y limpiar con frecuencia con agua y jabón neutro.
En tarimas de madera natural, aplicar aceite protector con filtro UV una o dos veces al año ayuda a prevenir daños por humedad y sol.
Manchas por cloro o productos de piscina
El cloro y otros químicos presentes en el agua de piscina pueden dejar marcas blanquecinas o pérdida de color en las zonas próximas al borde.
La solución pasa por aclarar con abundante agua limpia tras cada uso y, si es necesario, aplicar un limpiador específico para tarimas exteriores. En los modelos de madera natural, vuelve a hidratar con aceite protector para recuperar el tono.
