¿Al caminar por la tarima de tu casa, a veces, te invade la sensación de estar recorriendo una de esas aterradoras y viejas cabañas a las que nos tienen acostumbrados las películas de terror?
¿Tu respuesta es afirmativa?
En ese caso debes de saber que los suelos de madera crujen. Emiten un ruido, una especie de gruñido, cuyo origen se debe a los movimientos provocados en este material por el grado de humedad en el ambiente, sobre todo, y casi exclusivamente, cuando se trata de tarima maciza sobre rastreles. Los principales causantes de estas modificaciones son los inviernos secos con la calefacción o los veranos con el aire acondicionado. No tiene por qué ser viejo el suelo para que suene. Cuando se producen cambios higrométricos (variaciones en el grado de humedad) derivados del propio ambiente o del mortero, hormigón, pintura u otro material que se emplea en la obra, la madera experimenta movimientos, hinchándose o deshinchándose, lo que hace que su tamaño incremente o merme. Estos cambios propician que los clavos se desplacen, y quede ese rozamiento, que es lo que suena.
Sólo la tarima flotante; los suelos laminados, sintéticos o el parquet encolado, entre otros, no tienen por qué producir ruidos, siempre que la instalación se lleve a cabo de manera correcta.
¿Cómo es posible entonces acabar con estos ruidos en los suelos de madera?
- En ocasiones, si la humedad del ambiente es muy baja, la utilización de humidificadores puede ayudarnos a reducir los ruidos/ crujidos.
- Por otro lado, un remedio para que la madera no suene consiste en aplicar polvos de talco o parafina en los espacios que quedan entre las tablas. Si se hace así, se lubrican las zonas de unión de las tablas y aquellas en la que se encuentran los clavos, lo que disminuye en parte el sonido de manera temporal. Los polvos de talco actúan en el machihembrado, mientras que la parafina lo hace sobre el clavo. No obstante conviene aclarar que un entarimado sobre rastreles se expone a que cruja porque existe una cámara de aire debajo y es susceptible de abrirse debido a variaciones higrométricas.
De cualquier manera, si tienes ruidos o crujidos que no cesan con el tiempo, nuestro consejo es que consultes con el profesional que realizó la instalación.
Si quieres ampliar esta información acerca de los ruidos en los suelos de madera o necesitas resolver alguna duda concreta sobre tu hogar, tu oficina o tu proyecto, consulta con nuestro equipo de profesionales en Parquet Astorga, especialmente si estás en Málaga o en Andalucía; ¡estaremos encantados de atenderte!